LAS PERSONAS NO NECESITAN NI DEBEN PONER LÍMITES A SU APETITO ESPIRITUAL NI DE GRACIA.... En vez de eso deben..... "empeñarse de todas las formas posibles en aumentar sus deseos y obtener mayor placer espiritual... Nuestra hambre y sed de Dios y Jesucristo y la santidad no pueden ser demasiadas dado el valor de estas cosas, porque son cosas de valor infinito....
(por consiguiente) empéñese en fomentar su apetito espiritual y déjese incentivar.... El exceso no existe a las hora de consumir dicho alimento espiritual. No hay ninguna virtud en moderarse a la hora de darse un festín espiritual" Jonathan Edwards Las bendiciones espirituales del Evangelio representadas por un festín. The Works of J.E. Vol 14.