20 agosto, 2007

Wena po´h enano!! o El llamamiento eficaz (Parte VIII y final)

Taríamos llegando al uuuuuuúltimo punto del tema en cuestión. Un chico ladrón es llamado por el mismísimo Hijo de Dios a un encuentro casero que transtornaría por completo su vida.


8. Por último, este llamamiento fue eficaz, pues vemos los frutos que produjo. La puerta de Zaqueo fue abierta; su mesa fue servida; su corazón fue generoso; sus manos fueron lavadas; su conciencia fue aliviada; su alma estaba gozosa "Señor," dijo, "la mitad de mis bienes doy a los pobres; (porque me atrevo a decir que la mitad de lo que tengo se lo he robado a los pobres, y ahora lo devuelvo) "Y si en algo he defraudado a alguno, lo devuelvo cuadruplicado." Y Zaqueo de despoja de otra parte de sus bienes.


¡Wena Zaqueo!, tú te irás a acostar esta noche siendo muchísimo más pobre de como te levantaste esta mañana (pero también infinitamente más rico) pobre, muy pobre, en bienes de este mundo, comparado a lo que tenías cuando te subiste a ese sicómoro; pero más rico (hiperultramegamacroarchisuper más rico) en tesoros celestiales. Compadre, en esto sabremos si Dios te llama: si Él llama, será un llamamiento eficaz; no un llamamiento que tú escuchas y que luego olvidas. Sino que es un llamamiento que produce buenas obras.



Si Dios te ha llamado hoy, caerá al suelo tu copa de borracho de baruchos porteños, y se elevarán tus oraciones; si Dios te ha llamado el día de hoy, todas las cortinas de tu casa estarán corridas, y pondrás un letrero que dice: "Fui al templo a orar" Mañana habrá carretes etílicos y sexuales al por mayor pero si Dios te ha llamado, no irás. Y si has robado a alguien, si Dios te llama, devolverás lo robado; lo abandonarás todo para poder seguir a Dios con todo tu corazón. No creemos que un hombre o una mujer se hayan convertido a menos que renuncien a los errores de sus caminos; a menos que, de manera práctica, llegue al conocimiento que el propio Cristo es Señor de su conciencia y que Su Palabra su delicia. "Zaqueo, pégate una apuraíta, desciende, porque hoy es necesario que me quede en tu casa." Y Zaqueo bajó hecho un "cuete" lo recibió lleno de gozo. "Entonces Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor: Señor, la mitad de mis bienes doy a los pobres; y si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo cuadruplicado. Jesús le dijo: Hoy ha venido la salvación a esta casa; por cuanto él también es hijo de Abraham. Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido."



Ahora, una o dos lecciones. Una lección para el orgulloso. ¡Bajen, corazones orgullosos, Bajeeeeen! La misericordia corre en los valles, pero no sube a las cimas de las montañas. ¡Desciendan, desciendan, manga de orgullosos! "Porque derribó a los que moraban en lugar sublime; humilló a la ciudad exaltada, la humilló hasta la tierra, la derribó hasta el polvo." Y luego la construye otra vez. Además, una lección para ti, tu que estás elejado y desesperado: me da gusto que leas este humilde sitio; es una buena señal. No sé porqué lees este blog, quizás navegando por internet, quizás no eres flaite, pero si estás leyendo esto eres un tanto extraño, tan extraño como yo. Es necesario que haya hombres extraños para que puedan reunir a otros hombres extraños. Ahora, hay una muchedumbre de personas que se congrega en la iglesia; y si me permiten usar una figura de lenguaje, yo podría compararlos a un gran montón de cenizas entremezcladas con limaduras de acero. Pero si este mensaje tiene el apoyo de la gracia divina, servirá como un tipo de imán: no atraerá a las cenizas; ellas se quedarán donde están; pero tendrá la capacidad de atraer a las limaduras de acero. Por ahí está Zaqueo; por allá una María, por acuyá un Juan, a Elisabet, o a Claudio, o a Paola. Allí están (los elegidos de Dios) las limaduras de acero en medio de la congregación de cenizas, y este Evangelio, el Evangelio del Dios Eterno como un poderoso imán, los extrae de las cenizas. Allí vienen, allí vienen. ¿Por qué? Porque existió un poder magnético entre el Evangelio y sus corazones.



¡Ah!, amigo que estás lejos, ven a Jesús, cree en Su amor, confía en Su misericordia. Si tú tienes el deseo de venir, si te estás abriendo paso entre las cenizas para ir a Cristo, entonces es porque Cristo te está llamando. ¡Oh!, todos ustedes que se reconocen pecadores, ya sea hombre, mujer, jóvenes, adolescentes, guailones o niños, sí, ustedes, pequeñines ¿se sienten ustedes pecadores? Entonces crean en Jesús y serán salvos. Tú estás aquí por pura curiosidad, muchos de ustedes. ¡Wena! que ustedes sean encontrados y salvados. Me preocupo por ustedes para que no se hundan en el fuego del infierno. ¡Oh!, que le pongo color!! No es que le ponga o no, ES LA VERDAD!!! Ecuchen a Cristo mientras Él les habla. Cristo dice, "bajen," el día de hoy. Vayan pa´la casa humíllense ante el rostro de Dios: vayan y confiesen sus iniquidades con las que han pecado contra Él; vayan a casa y díganle a Él que están en la miseria y en la ruina sin Su gracia ; y luego mírenlo a Él, pues tengan la certeza que Él los miró primero a ustedes. Tú puedes decir " "lo que pa´ha es que quiero ser salvo, cachai? pero me temo que Él no quiere salvarme." ¡Alto ahí! ¡Alto ahí! ¡Ya para po´h loco! ¿Sabes que eso es casi una blasfemia? Casi. Si no fueras un ignorante, yo te diría que es una blasfemia parcial. No puedes mirar a Cristo antes de que Él te haya mirado a ti. Si quieres ser salvado, es porque Él puso en ti ese deseo. Cree en el Señor Jesucristo, y recibe el bautismo y tú serás salvo. Confío que el Espíritu Santo te está llamando. donde quiera que estés ¡APÚRATE! ¡Desciende! Viejito, profesional Comerciante, estudiante, empleado, damas y caballeros que no conocen a Cristo, que Él los mire a ustedes hoy. Escuchen este llamamiento de gracia inmerecida; y vo´h loco, escucha bien: Cristo puede estar mirándote a ti (confío que es así) y que te está diciendo: "Apúrate, baja, porque hoy es necesario que me quede en tu casa."


Paz

Gonzalo.


Nota: Agradezco a mi querido maestro Charles H. Spurgeon quien me facilitó este temazo. Este sermón fue predicado la mañana del Domingo 30 de Marzo de 1856 en la Capilla New Park Street, Southwark, Londres. Ha sido adaptado para que los choros y flaites del siglo XXI lo puedan entender. Las negritas y los énfasis son de acato. Gracias.