3. Es un llamado humillante: "Zaqueo, baja enseguida..."
Hay pastores y predicadores (lamentablemente me incluyo) que, llegado el momento de hacer un llamado a los oyentes, exaltan al hombre y levantan su orgullo, (eres especial, mejora tu autoestima convirtiéndote en cristiano, etc) de tal manera que el oyente dice en su interior: "Puedo convertirme cuando yo quiera, sin la influencia esa del Espíritu Santo". Han sido llamados a subir y no a bajar. Pero, mis queridos lectores flaitecillos, Dios siempre humilla al pecador.
Me acuerdo cuando Dios me dijo que bajara. Uno de los primeros pasos que tuve que dar fue precisamente bajarme de mis propias obras . Y qué porrazo fue ese!!! Creía que era tan bueno, tan justo, tan amble (tan nada). Luego me paré en mi propia capacidad, (era tan inteligente), con mi mirada altiva, seguro de mí mismo y.... Jesús me dijo: "Baja enseguida!! Te he derribado de tus buenas obras y ahora quiero derribarte de tu orgullo y tu propia suficiencia. Baja enseguida!! me dijo Cristo nuevamente, y me hizo bajar hasta que caí en algún punto donde creí que ya era suficiente (ya para poh´) Abajo!! desciende aún más... y bueno, tuve que bajarme y soltar todas las ramas del árbol de mis esperanzas (poética la volá), lleno de desesperación, entonces dije: "no puedo hacer nada, estoy perdido!!, las aguas envolvieron mi cabeza y me comencé a sentir un extraño del pueblo de Dios. Baja aún más!! tienes demasiado orgullo para ser salvo, le escuché decir. Entonces fui bajado por el Espíritu hasta ver toda mi corrupción, mi maldad, mi inmundicia.
"Baja", dice Dios cuando nos viene a salvar.
Ahora, mis queridos amigos pecadores o quien quiera que seas, no les servirá de nada ser orgullosos o aferrarse a su árbol: Jesús te hará bajar. Caerás por su gracia o caerás un día bajo la venganza. "El Señor levanta a los humildes, pero humilla a los malos hasta la tierra"
Me salió medio cuático, pero es cierto.
Paz.
Gonzalo